La berenjena inicia su historia como alimento de los seres humanos en la India y continúa en África, para llegar durante la Edad Media a Italia.
No obstante al principio se creía que era venenosa y en el Viejo Continente la llamaban “la raíz árabea”.
A lo largo del tiempo se la fue cultivando con fines ornamentales porque parecía una planta que daba huevos, estas plantas se pueden encontrar aún, pero no son tan sabrosas como la conocida variedad morada que se consume actualmente.
En China, como parte de su "dote matrimonial", se pedía a las mujeres que cocinaran al menos 12 recetas de berenjena antes de su boda.
En Turquía, se dice que el "imam bayeldi", un delicioso plato de berenjena rellena cocinada a fuego lento en aceite de oliva, hizo que un líder religioso se desmayara en éxtasis.
PASTELITOS DELICIOSOS // de berenjena y queso
INGREDIENTES
1 kilo de berenjenas, 400 gramos de tomate triturado, 1 paquete de queso mozzarella, 50 gramos de queso parmesano, 1 cebolla, 1 ramita de albahaca, 4 cucharadas de aceite de oliva, mantequilla, sal y pimienta a gusto.
PREPARACIÓN
Cortar los berenjenas a lo largo, en láminas de medio centímetro de espesor. Salar y dejar reposar una hora para que suelten el agua amarga.
Pelar y picar la cebolla. Freírla en una sartén con dos cucharas de aceite, añadir el tomate, salpimentar, cocer diez minutos, apagar e incorporar la albahaca picada.
Lavar las berenjenas para retirar la sal, secarlas, cocerlas al grill o a la plancha untada con aceite, uno o dos minutos por cada lado. Usar la mitad para forrar el fondo y las paredes lisas de cuatro moldes untados con mantequilla.
Rellenarlos con la salsa de tomates alternando las berenjenas restantes con la mozzarella en taquitos y con el queso parmesano rallado. Terminar con las berenjenas, introducir los moldes en el horno, precalentado a 180 grados centígrados, y cocer durante 30 minutos
Retirar los pastelitos del horno, dejarlos enfriar y servirlos con la salsa restante decorados con alguna hojita de albahaca fresca.
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