Se ha demostrado que el té, especialmente el té chino verde, posee propiedades que ayudan a disminuir el colesterol y a prevenir enfermedades cardiovasculares, a proteger a la piel de los rayos ultravioleta e incluso puede ayudar a bajar de peso.
La planta del té verde crece en muchos rincones de la tierra. La diferencia entre el té verde y el té negro es la forma en que las hojas de las plantas son procesadas, simplemente el té negro es fermentado y el té verde no lo es.
Lo que hace al té verde tan benéfico es que los polifenoles, que son substancias nutritivas que se encuentran naturalmente en el té, no son destruidos en el proceso de fermentación.
Estas substancias actúan como poderosos antioxidantes y son los responsables de muchos de los beneficios del té verde.
Estos antioxidantes ayudan a prevenir el daño ocasionado a las células por los radicales libres, y por lo tanto ayudan a prevenir muchos problemas como el cáncer, también a evitar a que se tapen las arterias y a disminuir la hipertensión arterial.
Hasta el momento no se ha establecido la cantidad adecuada de té verde que se deba de consumir al día, en algunos estudios se dice que una taza es suficiente y algunos dicen que de dos a cuatro, es importante tomar en cuenta que el té verde contiene cafeína, alrededor de 40 mg por taza, en comparación con el café que contiene de 80 a 120 mg por taza, así que no hay que abusar de su consumo.
Una buena idea es sustituir el café por el té verde, de esta manera aprovechas todos sus beneficios con menos cafeína.
Si tienes Síndrome de intestino Irritable, intenta tomarlo y observa sus efectos, pero no olvides que la cafeína que contiene puede ser irritante, aunque también te puede ayudar, especialmente si te es difícil dejar de tomar café.
El té verde lo puedes adquirir en cualquier supermercado o tienda naturista, solo recuerda que si tienes dudas o aumentan tus síntomas, debes consultar con tu médico.
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