Pese a que se lo considera un vegetal, la palta en realidad es un fruto, con sabor neutro, lo cual hace que se adapte bien a otros alimentos, como entradas o preparaciones, o que pueda ser consumida sola.
Se recomienda su consumo en todas las edades y en estadios como embarazo, madres lactantes, deportistas, y muy especialmente en aquellas personas propensas a enfermedades cardiovasculares.
Pero no es conveniente para quienes sufren de insuficiencia renal, ya que es rica en potasio, mineral que esta población debe disminuir o evitar.
Este fruto aporta importantes beneficios al organismo, a pesar de su aporte calórico, considerado elevado (130 calorías cada 100 gramos), y de su aporte de grasas, entre las que predominan las monoinsaturadas, benéficas, cuya particularidad de arrastrar el colesterol malo y aumentar el bueno, y las grasas poliinsaturadas. Esto hace que disminuya el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares.
Entonces, la palta, fruto de alto valor nutritivo, resulta sumamente benéfica dada su riqueza en vitaminas, minerales y aceites vegetales.
Virtudes
Prevención
Varios estudios científicos confirmaron que la palta es una poderosa herramienta de prevención contra el cáncer, todo tipo de enfermedades cardiovasculares y problemas de la vista, característicos de las personas mayores.
Antioxidantes
La palta presenta antioxidantes y ácido fólico, útiles para combatir los síntomas del envejecimiento. Entre otras virtudes, se considera que puede prevenir la arterosclerosis y enfermedades similares.
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