Tostada diferente

INGREDIENTES

2 huevos batidos, 1 taza de leche, ½ cucharadita de vainilla, una pizca de canela, ½ cucharadita de cacao, 8 rebanadas de pan y 3 cucharadas de mantequilla. PARA EL ACOMPAÑAMIENTO: Frutas pulposas como duraznos, frutillas o manzanas precocidas, 1 cucharadita de miel o maple y 1 cucharadita de maicena.



PREPARACIÓN

Combinar en un tazón los huevos, la leche, la vainilla, la canela y el cacao.

Remojar las rebanadas de pan en la mezcla y

escurrirlas.

Derretir la mantequilla en una sartén y freír cada rebanada de pan por ambos lados hasta que dore.

acompañamiento

Licuar la cantidad

deseada de frutas con agua hasta que queden

completamente desintegradas.

Colocar la mezcla en una cacerola a fuego medio y agregar la miel y la maicena.

Cocinar revolviendo hasta que rompa el hervor y tome la consistencia de crema.

Esparcir la preparación sobre las tostadas francesas cuando estén frías.

Puede variar el acompañamiento con miel de maple o miel de abejas. Además puede agregar a la preparación pedacitos de chocolate y diferentes frutas.

Las tostadas francesas o torrijas, aparecen ya documentadas en el siglo XV, al parecer como plato indicado para la recuperación de las parturientas.

Por otra parte, las tostadas francesas eran a comienzos de siglo XX muy habituales en las tabernas de Madrid y se servían con vasos de vino. También se las asocia con la cuaresma, ya que durante el tiempo en que no se podía comer carne las personas consumían de sobremanera esta preparación.

A pesar de que en el mundo anglosajón se la conoce como “french toast”, ciertamente no proviene del país galo.

Un supuesto más que nace en torno a esta receta es que tiene origen europeo, ya que el nacimiento de la receta podría atribuirse a cocineros de la Europa del medievo que, a raíz de la necesidad de encontrar un uso al pan duro, lo remojaban en leche y huevo. Se dice que eran bastante ahorrativos y no les gustaba desperdiciar la comida.