Budín de acelgas con salsa de pimientos asados

La acelga siempre ha sido una verdura desprestigiada, catalogada como insípida. Ser simplemente hervida ha sido su modo de consumo durante décadas, pero no hay nada más lejos de la verdad: la acelga tiene muchísimas posibilidades gastronómicas y posee grandes cualidades nutricionales, además de su bajísimo valor calórico (sólo 20 kilocalorías por cada 100 gramos), tiene apreciadas cantidades de vitamina C, ácido fólico y potasio. La fibra también se destaca entre sus propiedades, el contenido en grasas es prácticamente inexistente y carece de colesterol. Esto nos hace constatar, que no siempre somos conocedores de lo que estamos comiendo. Les propongo preparar un exquisito budín, con una verdura que tal vez ahora, empiece a ser habitué de nuestra cocina: la acelga.

INGREDIENTES

[6 personas]
• 2 atados de acelga
• 1 cebolla
• 1 C de mantequilla
• 100 grs. de queso rallado más extra para
espolvorear
• 4 C. de crema de leche
• 3 huevos
• Sal, pimienta y nuez moscada
Salsa:
• 2 pimientos rojos
• 4 C. de aceite de oliva
• ½ tz. de caldo de pollo o de verduras
• 1 C. de mantequilla

PREPARACIÓN

En una olla hervir la acelga hasta que se marchite, exprimirla muy bien y luego picarla finamente. Rehogar la cebolla picada en una sartén con la mantequilla. Batir los huevos junto con la crema, el queso, sal, pimienta y nuez moscada a gusto y agregar también la acelga y la cebolla salteada. Enmantecar bien un molde rectangular o moldes individuales y verter la preparación de acelga, espolvorear con queso rallado y llevar a horno precalentado a 350ºF, durante 30 min. aproximadamente. Para la salsa de pimientos asados, colocar los pimientos bien lavados en una lata para el horno, rociar con 2 C de aceite de oliva y hornear a horno fuerte hasta que la piel esté casi quemada. Retirar del horno, colocar los pimientos dentro de una bolsa plástica hasta que enfríen completamente. Pelar, descartar las semillas reservando los líquidos y licuar junto al resto del aceite de oliva y el caldo. Servir el budín con la salsa de pimientos aparte para que cada comensal se añada a su gusto, o colocar la salsa a manera de espejo en cada plato.