domingo, 5 de junio de 2011

Pollo a la naranja Las naranjas se convierten en la fruta de la estación con su importante aporte para combatir el resfrío.

Pollo a la naranja

INGREDIENTES
•Una pechuga de pollo
•Un pimiento
•Un brócoli
•Una naranja cortada en gajos
•Jugo de una naranja
•Azúcar
•Sal y sazonador
•Cebolla en hoja
•Media cucharadita de ralladura de naranja
• Cantidad necesaria de harina
•Media taza de caldo


PREPARACIÓN
Filetear la pechuga y sazonarla con el jugo de naranja, la sal, el azúcar y el sazonador y dejarla reposar o marinar por espacio de una hora, luego pasarla por harina y dejarla reposar por media hora más en la refrigeradora, freír y reservar. Saltear la parte blanca de la cebolla china, echar las verduras, la ralladura de naranja y el caldo con chuño. Rectificar la sazón y verter la salsa sobre la pechuga previamente frita.

Con el cambio de estación las naranjas se convierten en las mejores aliadas de la salud, ya que son ideales para combatir el resfrío y la gripe gracias a la vitamina C que poseen, pero ésta no es la única cualidad que llevan dentro de ellas ya que los beneficios son innumerables y si aún no lo sabes, te los contamos a continuación.
La naranja es rica en vitamina C, ácido fólico y minerales como el potasio, magnesio y calcio. También aporta cantidades importantes de betacaroteno, lo que hace de la naranja una fruta con un gran poder antioxidante. Contiene una buena cantidad de fibras que se encuentran concentradas en la parte blanca de la naranja, entre la pulpa, señala el nutricionista Juan Velarde.

EL APORTE DE LA VITAMINA c . Asimismo, la vitamina C es necesaria para producir colágeno, proteína decisiva en el crecimiento y reparación de las células de los tejidos, encías, vasos sanguíneos, huesos y dientes, y para el eficiente aprovechamiento de las grasas, por lo que se le atribuye el poder de reducir el colesterol. De igual forma, este elemento vitamínico ayuda a una mejor cicatrización de heridas y reducción del efecto de muchas sustancias productoras de alergias; también colabora para contrarrestar problemas circulatorios y várices.
A ello hay que agregar que esta colorida fruta tiene propiedades anticancerígenas, como lo demuestran varios estudios avalados por el Instituto Nacional de Cáncer de Estados Unidos, los cuales señalan que el consumo masivo de jugo de naranja ayuda a reducir diferentes tipos de cáncer, principalmente el de estómago.

SALES PARA REFORZAR. Las sales minerales que la naranja contiene, sumado a su contenido de potasio, vitamina C y otros nutrientes, la transforman en una fruta perfecta para reponer los minerales y líquidos perdidos después de una actividad física exigente. El zumo de naranjas, diluido en agua es una excelente bebida rehidratante ideal para después de ejercitarse y reponer el agua y los minerales perdidos durante la exigencia física, señala Velarde.

EL PODER CURATIVO. Las naranjas poseen propiedades expectorantes. La parte de la fruta más efectiva es la cáscara, la cual se deseca ya sea estando verde o madura. Con ella se elabora un jarabe, hirviendo dicha cáscara en una mezcla de agua, miel y azúcar, que se usa como calmante para la tos.
También se puede preparar un cocimiento corto de la cáscara con agua y utilizarla como digestivo, muy efectivo cuando hay hinchazón del estómago.
COMPLEMENTO DE ESTACIÓN para elegir. Los principales mercados de la ciudad ya se ven invadidos por esta colorida y deliciosa fruta, en el mercado Abasto las naranjas de Yapacaní las venden a 24 bolivianos el 100 y también se las puede adquirir en menos precios según la cantidad que se requiera.
Las naranjas son ideales solas o bien en ensaladas, cocteles de frutas (cuidado por cierto con las mezclas de frutas), o incluso en un delicioso, sano y exquisito helado de naranja. Ni qué decir del ya más que conocido zumo de naranja.
Deben ser consistentes, firmes y de cáscara o piel lisa. El color anaranjado o más vivo, es a priori un indicador de su buen estado, así como su peso, a mayor peso más cantidad de jugo.
Las naranjas frescas pueden durar más de tres semanas en la nevera, aunque si se les guarda a temperatura ambiental se les puede sacar más zumo.
No está recomendado para los que tiene problemas digestivos: gastritis, hernia de hiato, acidez, úlceras.

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