Para sorprender a la familia con tus habilidades culinarias, prueba esta receta que se puede servir con la salsa de tu elección o simplemente con un poco de aceite de oliva o mantequilla derretida y queso parmesano encima.
INGREDIENTES
[4 personas]
Para la masa:
• 400 grs. de harina
• 2 huevos y 1 yema
• 4 C. de agua
• 1 C. de aceite
• 1 c. de sal
Para el relleno:
• 200 grs. de ricotta
• 30 grs. de queso crema
• 1 C. de queso parmesano rallado
• Nuez moscada, sal y pimienta a gusto
• Mantequilla o aceite de oliva, cantidad necesaria
• Hojas de salvia frescas
• Queso parmesano rallado a gusto
PREPARACIÓN
Mezclar la harina con la sal, hacer un hueco en el centro y colocar los huevos, la yema, el aceite y el agua. Comenzar mezclando con un tenedor hasta incorporar todos los ingredientes, amasar levemente y dejar descansar la masa tapada con un repasador una hora. Para el relleno, mezclar la ricotta con el resto de los ingredientes hasta obtener una pasta compacta. Dividir la masa en dos partes, estirar una parte con un fuslero sobre una tabla enharinada de manera que quede muy fina, darle la forma de un rectángulo, colocar montoncitos del relleno (alrededor de una cucharada) cada 3 cm., humedecer apenas con agua alrededor del relleno; estirar la otra mitad de la masa, cubrir la parte de masa a la que se colocó el relleno, presionar ambas masas alrededor del relleno y cortar en cuadrados de 3 a 4 cm, con el cortador de raviolis, o en círculos de 3 cm. de diámetro. Cocinar los raviolis en agua salada por 5 min. Retirar y reservar un poco del agua de la cocción. Para servir, derretir la mantequilla en una sartén añadir las hojas de salvia para que esta tome sabor, agregar un poco del agua de la cocción y “sartenear” los raviolis en esta mezcla, servir con queso parmesano rallado.
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