Platos de diversa especie se sirven en locales de expendio de alimentos, en los mercados o hasta en plena calle.
Quien vive en La Paz, puede alimentarse igual si tiene 5 bolivianos en el bolsillo o si puede darse el lujo de pagar 200 bolivianos por un sofisticado plato de la cocina francesa.
LO CRIOLLO
Cada zona se caracteriza por su gastronomía los restaurantes ofrecen, entre sus especialidades, el Plato Paceño, la Sajta de Pollo, el Ají de Lengua, Anticuchos, Fricasé, Salteñas, Chicharrón, Lechón al horno, Fritanga, Thimpu, Lagua de chuño, Wallake, Chairo, Jakonta, que son precisamente platos de la tradición paceña aimara y mestiza.
LA HISTORIA
DEL FRICASÉ
Según estudiosos de la historia gastronómica, el Fricasé que es un platillo inminentemente paceño.
Su nombre proviene de un vocablo del idioma francés que en traducción significa “carne troceada”.
Se dice que españoles trajeron la costumbre de esta comida elaborada en base a carne de cerdo para menú posterior a la noche de bodas de los recién casados.
La fusión de culturas hizo que a la receta se le incremente el nativo chuño, los ajíes y el mote. La cocción y el sabor son propios de nuestras mestizas cocineras.
LA SALTEÑA Y
LAS TUCUMANAS
Se supone que las salteñas y las tucumanas provienen de migraciones argentinas a La Paz. Las famosas empanadas de nuestros vecinos, se fusionaron con rellenos criollos y nació el jugoso manjar de media mañana.
El precio de este producto oscila entre Bs 1 a 5. Existen salteñas de pollo, carne e incluso de fricasé.
LAS LLAUCHAS Y EL API
Un desayuno inminentemente paceño es el api con llaucha. Aunque el primero tiene sus orígenes orureños, la famosa empanada elaborada con queso relleno y que se sirve caliente, es uno más de los patrimonios paceños.
Cuentan las productoras de esta delicia, que la fama de las llauchas trascendió fronteras y llegó hasta las mesas de personajes conocidos mundialmente como el dibujante chileno “Pepo”, caricaturista de “Condorito”, quien incluso en una de sus tiras cómicas mencionó la “jugosa empanada de los bolivianos”, refiriéndose a la llaucha.
EL CHAIRO
Dicen que el servirse un plato de chairo paceño equivale a tomar el elixir de la energía, extraída desde la madre tierra misma. Esta sopa elaborada con chuño molido, mote, carnes rojas y cebollín, contiene el sabor criollo que más identifica el medio día en esta ciudad.
Según expertos culinarios, el chairo siempre deberá ir acompañado por una crocante marraqueta y un vaso de la tradicional “papaya Salvietti”.
LOS ANTICUCHOS
Trozos de corazón de res y papa cocidos sobre una parrilla, ensartados en un fierro y acompañados por ají de maní, son ingredientes del “anticucho”.
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