Los Aztecas preparaban el "Tzoalli", una comida típica hecha con semillas de amaranto y chía tostadas, miel de maguey y harina de maíz. Por otra parte, la harina de chía podía ser almacenada mucho tiempo debido a los antioxidantes que posee, podía transportarse fácilmente en viajes largos y se utilizaba como moneda de pago para tributos y transacciones.
La ciencia moderna ha llegado a la conclusión de que las dietas precolombinas eran superiores a las que actualmente se consumen en la misma región, y la chía, que sobrevivió sólo en pequeñas parcelas en áreas montañosas escarpadas del sur de México, Guatemala, Nicaragua y Bolivia, vuelve, 500 años más tarde, a recobrar su papel protagónico en la nutrición humana. Estas semillas ofrecen ahora al mundo una nueva oportunidad para mejorar la nutrición de niños, jóvenes, adultos y personas de la tercera edad por ser una fuente natural de ácidos grasos Omega-3, antioxidantes, proteínas, vitaminas, minerales y fibra dietética.
CHÍA – AVENA:
PARA LA NUTRICIÓN
Sociedad Industrial Molinera S.A. dentro de su línea de productos “Princesa”, presenta CHIAVENA, una combinación de cereales que posee innumerables propiedades y ventajas para la alimentación diaria de toda la familia. La chía y la avena son ricas en proteínas, hidratos de carbono, vitaminas, minerales, oligoelementos, aminoácidos, fibra y los ácidos grasos Omega 3 y 6 que junto a otros alimentos como carnes, pescados, vegetales y frutas, harán que su alimentación sea la correcta.
Chiavena es un regulador de la digestión por su alto contenido de fibra, ayuda a controlar los niveles de colesterol y la tensión arterial, colabora al mantenimiento del sistema cardiovascular y mejora la actividad cerebral; es ideal para personas diabéticas. Es una fuente de energía por lo que se recomienda su consumo para los niños, los jóvenes y especialmente los deportistas.
Los especialistas en enfermedades cardiovasculares sostienen que la combinación de la avena y la chía es un alimento perfecto para todas las personas, porque contiene ácidos grasos insaturados, linoleicos, que el cuerpo no genera. Las semillas de Chía contienen los benéficos triglicéridos de cadena larga (LCT) en la justa proporción para reducir el colesterol de las paredes arteriales. Además de su altísimo contenido en Omega-3, la chía tiene también otros componentes muy interesantes para la nutrición humana: Antioxidantes, fibra, proteínas, vitaminas B1, B2, B3, y minerales tales como fósforo, calcio, potasio, magnesio, hierro, zinc y cobre.
La semilla de Chía es considerada “suplemento dietético” por la FDA (Food and Drug Administration, USA). Completa las exigentes regulaciones de contenido de nutrientes alimenticios establecidas por esta organización para ser un “alimento saludable”.
La fibra es la parte estructural de frutas, verduras, semillas y granos, que el sistema digestivo no es capaz de digerir ni de destruir. Actualmente, profesionales e instituciones de salud, recomiendan un consumo entre 25 a 30 gr. diarios de fibra en adultos. La chia aporta 27,6 gr. de fibra por cada 100 gr. de semilla, lo que equivale al 100 por ciento de las recomendaciones diarias para la población adulta.
La fibra tiene la capacidad de aumentar el volumen del bolo fecal que transita en el tubo digestivo. Esto se debe principalmente a su capacidad para absorber una importante cantidad de agua coadyuvando al tránsito intestinal, lo que reduce su tiempo de permanencia en el aparato digestivo, a la vez que ayuda a regular los movimientos intestinales, evitando el estreñimiento, la diverticulosis, el cáncer de colon.
Por otro lado, la fibra de chiavena puede formar disoluciones con el contenido gastrointestinal, de tal forma que las sustancias que tienen que absorberse les cuesta más hacerlo, como le sucede a la glucosa (azúcar) y a las grasas.
Gracias a esta función, la fibra contribuye a la prevención de múltiples enfermedades como la enfermedad cardiovascular, diabetes, como se ha demostrado en innumerables estudios epidemiológicos.
CÓMO CONSUMIR CHIAVENA
En el desayuno se puede preparar avena con leche de forma habitual y agregar al final las semillas de chía.
El los jugos de frutas o de preferencia con yogurt o leche de soya. Se vierte una cuchara de avena y un sobrecito de chia, no solo es delicioso sino que le aporta múltiples beneficios para su salud. También se puede consumir con ensaladas, frutas, salsas, sopas, cremas, verduras, etc. También se puede incorporar, tanto entera como molida, a panes, galletas, barritas energéticas o repostería. No tienen sabor ni olor. Para aprovechar al máximo sus nutrientes es mejor consumirla molida. Antes de servir, se deben mover las semillas con una cuchara de madera para que se repartan por toda el agua. Resulta una bebida refrescante y digestiva.
SIMSA
Sociedad Industrial Molinera S.A. es una empresa con más de ochenta años al servicio de la alimentación del pueblo de Bolivia, cuenta con varias líneas de productos:
La Harina Princesa, en presentaciones que van desde un kilo hasta 50 kg.
La Avena Princesa, con sus presentaciones de avena instantánea, laminada, saborizada; Avena Mujer, fortificada con minerales y vitaminas.
La nueva línea de cereales de desayuno que no tienen que envidiar a ningún cereal importado y con la calidad de los granos bolivianos con la fortificación de 12 minerales y vitaminas con el objeto de frenar la subalimentación de la población infantil.
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