Para la masa: 1-1/2 taza tamaño té de harina, 100 grs. de mante-
quilla, 2 cucharadas soperas de queso rallado, agua: cantidad necesaria. Para el relleno: 1 cucharada sopera de aceite: 1 diente de ajo picado, 1 cebolla picada, sal, pimienta y nuez moscada a gusto, 1 taza tamaño té de espinaca o acelga cocida, exprimida y picada, 150 grs. de ricota compacta, 2 huevos, 100 cm3 de crema, 1/2 taza de nueces picadas (para espolvorear).
PREPARACION
1. Masa: Colocar la harina
y la mantequilla en un bol. Desmenuzar hasta formar un arenado. poner queso rallado y agua, de a poco, y formar una masa tierna.
Envolver con un papel film y reservar en la heladera por 30 minutos. Retirar.
Estirar con un palo de amasar hasta obtener un espesor de 3 mm.
2. Forrar moldecitos
para tarteletas de 5 cm. de diámetro. Adherir bien la masa en los costados y en la base. Pinchar con un tenedor. Precocinar en horno moderado. Retirar y reservar. Relleno: en una sartén con aceite, rehogar el ajo, la cebolla y una pizca de sal.
Adicionar la espinaca y cocinar hasta que esté bien seca.
3. Retirar del fuego
y pasar a un bol. Dejar enfriar. Agregar la ricota, los huevos y la crema. Agregar
sal, pimienta y nuez moscada. Armado. Ubicar el relleno en las tarteletas. Espolvorear con nueces y llevar a horno a temp. moderada hasta que el relleno esté firme y suavemente dorado. Retirar, dejar entibiar y desmoldar.
Las tartaletas
Rellenas del ingrediente deseado, son conocidos como entremeses, son platos que no se incluyen en el menú y se sirven al principio de la comida. Su función es la de abrir el apetito y excitar el sentido del gusto, algo que convierte en esencial la buena presentación de los mismos. Por otra parte, los entremeses consiguen dar tiempo extra a la cocina para la preparación del menú. Un ejemplo típico de entremés son las tartaletas. Son pastelillos de base harinosa y normalmente tienen un tamaño pequeño. Su elemento principal es el relleno, que puede ser de diversos géneros, pero acostumbran a presentar varias decoraciones con otros ingredientes, haciendo de las tartaletas un conjunto vistoso a la vez que sabroso.
Las masas que habitualmente se utilizan para su elaboración son las de hojaldre y la pasta quebrada, aunque también se puede utilizar la pasta choux y la que se usa para hacer brioche. Con estas masas se da a las tartaletas diferentes formas como por ejemplo de barquito, de cesta o de cazoleta entre otras. Normalmente, todas las variedades se pueden comer de un solo bocado.
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