150 grs. de garbanzos secos, 150 grs. de zanahoria, 1 pimiento rojo, 150 grs. de repollo rizado, 75 grs. de brotes de soja, 1 cebolla pequeña, 1 diente de ajo, 1 manojo de cebollino tierno, una pizca de cúrcuma, vinagre balsámico, aceite de oliva fino, sal.
PREPARACIÓN
A Dejar los garbanzos en remojo durante 12 horas. Al agua, que debe ser abundante, añadir una cucharada de sal gruesa.
Escurrir, enjuagar y cocinar lentamente en agua hirviendo. Retirar la espuma y añadir sal a mitad de cocción. Pelar la zanahoria y el pimiento y cortar en bastones muy finos. Cortar a cebolla y el repollo en juliana.
Cuando los garbanzos estén tiernos, escurrir.
En una cacerola, rehogar la cebolla en aceite de oliva. Cuando esté transparente, añadir la zanahoria, dejar cocer hasta que se ablande un poco. Incorporar el repollo, los brotes de soja, y sazonar con sal, cúrcuma y unas gotitas de vinagre. Cocinar todo durante unos minutos, hasta que las verduras estén cocidas, tapar y reservar.
En otra sartén, sofreír los garbanzos durante unos min. Remover. Añadir
el ajo cortado a láminas. Dorar los garbanzos. Retirar del fuego y servir en los platos con una ración de verduras por encima. Espolvorear con cebollino picado.
En el mercado
El garbanzo puede adquirirse seco, en conserva, tostados, procedentes de la agricultura biológica o utilizar su harina para preparar alimentos rebozados.
Además de cocidos, los garbanzos también se pueden comer germinados, en refrescantes ensaladas, o incluso tostados, en una sartén o al horno, como aperitivo o tentempié.
Con los garbanzos se preparan otras recetas deliciosas, como el tradicional hummus o paté de garbanzos, muy popular en Oriente Medio.
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