En enero en el Reino Unido hubo un gran escándalo cuando se supo que las hamburguesas que se vendieron en diferentes supermercados eran de carne de caballo. En menos de los que canta un gallo retiraron los productos y a los clientes que lo solicitaron se les reembolsó el dinero gastado.
Después de la polémica que fue noticia mundial, en París, la alta cocina está tratando de reivindicar la carne de caballo y la está incluyendo en sus menús más exclusivos.
Reconocidos chefs en Francia quieren desmitificar su consumo. Aseguran que la carne de caballo es de mejor calidad y es más sana. La explicación es que los caballos solo se alimentan de avena, cebada y heno a diferencia de otros animales. Italia y Polonia son actualmente los países con mayor producción y consumo.
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