El italiano Vincenzo Corrado (1733) fue el primero que metió tomates triturados al horno, creando algo parecido a una pizza. Otros dicen que fue a finales del siglo XIX, cuando Raffaele Esposito sorprendió a la reina Margarita con un plato formado por tomate, mozzarella y albahaca, ingredientes con los colores de la bandera italiana.
Entre los alimentos y cosas del demonio
En Hungría se tira sal en el umbral de una casa nueva porque se cree que la sal protegerá del demonio a los habitantes del hogar. La historia cuenta que los europeos, que creían en vampiros solían rociar semillas de mostaza sobre el techo de sus viviendas con la finalidad de mantenerlos alejados de sus hogares.
No hay comentarios:
Publicar un comentario